La museología necesita profesionales apasionados y orgullosos de su trabajo; que lo respeten y lo hagan respetar. El Museólogo tiene una vocación innata que no se puede ocultar, disimular ni negar. Está ahí, siempre. Si tenés ganas de estudiar esta carrera y entrar a un mundo que, no lo vamos a ocultar, requiere esfuerzo, lucha, sudor y lágrimas (como cualquier profesión en el ámbito de la cultura ya que muchas veces somos el último orejón del tarro) pero que al mismo tiempo te da tantas satisfacciones y alegrías, te pasamos ALGUNAS (creo que en Entre Ríos también hay) de las instituciones donde se dicta (todas con diferentes enfoques). Y como siempre: ¡LARGA VIDA A LOS ÑOÑOS! :D