Noticias: Muestra en la casa de Victoria Ocampo HASTA EL 24 DE NOVIEMBRE

25 de octubre del 2013MUESTRA
Villa Ocampo y una exposición donde el tiempo se detuvo



La casa de Victoria Ocampo, construida en 1890 en Beccar, es el escenario en donde se recrea la vida diaria en esos años, con automóviles, vestimenta, gastronomía, vajilla, objetos personales, libros escolares y otros testimonios de un período de transición entre la Argentina del siglo XIX y la modernidad.


“La Gran Ilusión” es el título de la muestra que abrió sus puertas hoy y da cuenta de la vida cotidiana en Villa Ocampo durante la Belle Epoque: ya desde el ingreso recibe al visitante con la imagen de cuatro cabras dando vueltas por el excelso jardín, tal como ocurría entonces, ya que Silvina tenía una cabrita llamada Blanchette, que aparece en varias imágenes del álbum familiar.

Esta casona del partido de San Isidro, donde vivieron las hermanas Silvina y Victoria Ocampo y por donde pasaron destacados escritores de la Argentina y el mundo, cambió su guión curatorial para mostrar cómo era un día en el 1900, por lo que se pueden ver en el jardín autos antiguos, una cancha de badminton y otra de criquet, y dos maniquíes en la puerta vestidos como a la vieja usanza.

La casa es la verdadera protagonista de esta exposición más que sus habitantes, ya que representa la mentalidad el clima social y cultural y los valores estéticos de “una época que tenía sus ojos puestos en Francia e Inglaterra y que la familia encarnaba esa tradición de modernizar el país”, en palabras de Ernesto Montequin, cocurador junto a Fabio Grementieri.

“Esto era un ambiente mucho más rural, aunque refinado a la vez. No había asfalto, la familia venía de vacaciones varios meses de noviembre a marzo, en las que las hermanas Ocampo estudiaban, tomaban clases de idiomas y tenían actividades en distintas partes como la biblioteca o la sala de música”, según cuenta a Télam Nicolás Helft, director ejecutivo de Villa Ocampo (Unesco).




Anticuarios y coleccionistas prestaron obra para esta exposición, así como también el Museo del Traje aportó una parte importante y varios de los modelos se pueden ver en la casa: una época en que las mujeres se liberan de los rigores del corsé para adoptar diseños como el tailleur y los sombreros, con penachos de pluma de avestruz, o el canotier de paja para los días de verano.

En esta casa, los Ocampo materializaron un estilo de vida que combinaba tradiciones heredadas –la cocina criolla— con las innovaciones tecnológicas de la época como por ejemplo su propio generador eléctrico, o el estereoscopio donde la familia miraba sus fotos en tres dimensiones, presente en una de las salas.

El estilo de vida tenía como eje la ilustración y el refinamiento social: en los viajes a París –con vacas y gallinas que daban leche y huevos frescos durante la travesía— se compraban libros, partituras y grabados, se asistía a conferencias y exposiciones de arte y los miembros de la familia se hacían retratar por pintores mundanos que pertenecían al círculo de Proust o de Henry James.
 

La galería del fondo, rodeada de robles, magnolias, álamos enamoradas del muro, jazmines y Santa Ritas que trepan hacia los balcones, da a una fuente que conducía hacia el río y que estos días permite ver a cuatro patos blancos dando vueltas para escenificar el lugar tal como lo percibían sus antiguos dueños, un jardín casi diez veces más grande que el de hoy.

La exhibición, que abarca todos los espacios de la casa, fue realizada con la colaboración de especialistas en historia, arquitectura, decoración, moda, jardinería, vida cotidiana, ocio, gastronomía, tecnología y educación.

Se podrá visitar la muestra hasta el 24 de noviembre, de miércoles a domingos de 12.30 a 19 en Villa Ocampo, calle Elortondo y Presidente Uriburu, en Beccar, partido de San Isidro.

Fuente: http://www.telam.com.ar/notas/201310/38026-villa-ocampo-y-una-exposicion-donde-el-tiempo-se-detuvo.html

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